La cooperativa salmantina especializada en carne de vacuno, Dehesa Grande, sigue siendo un valor seguro para la provincia, y es que aunque la pandemia también les ha afectado directamente, su afán por seguir aportando valor al mercado nacional parece que les hace imbatibles.
La cooperativa integrada por 600 ganaderos principalmente de Salamanca, aunque también hay de Zamora y de Sayago, está “sorteando” la situación a base de mucho sacrificio y responsabilidad por parte de sus socios y del equipo técnico. “Nuestros esfuerzos radican directamente en el ganadero porque en la cooperativa trabajamos en la defensa de sus intereses y en afianzar más el mercado nacional, aunque sean tiempos complicados” explica el gerente de la cooperativa, Octavio Gonzalo.
Respecto a ese mercado nacional hay una realidad que sí les está afectando duramente: el cierre del canal HORECA. Así, la falta de movimientos turísticos durante el verano, el drástico descenso de celebraciones y por supuesto el cerrojazo de la hostelería han sido tres de los muchos hándicaps a los que Dehesa Grande se ha tenido que enfrentar. “Además, la venta de piezas nobles como el solomillo, chuletón o entrecot han sufrido muchísimo y sus precios han bajado y por tanto nuestra rentabilidad” subraya Gonzalo.
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